por Catalina Donoso

Hace tiempo que tenía esta película en la mira, pues me llegó la información, de parte del MGM el pasado septiembre del 2021, al ver el tráiler no me llamó la atención, pero después de todas las nominaciones por las diferentes academias cinematográficas, me dije bueno vamos a darle una mirada más detallada.
Después de todo “Licorice Pizza” recibió cinco nominaciones a los premios «Bafta»; incluyendo como Mejor película, mejor guión, mejor edición, mejor dirección Paul Thomas Anderson y mejor actriz Alana Haim. Posteriormente, llegaron las nominaciones a los premios de la Academia «los Oscar» por mejor película, mejor guión y mejor director a Paul Thomas Anderson. Con este curriculum te quedas sorprendido y las expectativas se van por las nubes.

La crítica está muy dividida, por lo visto hay gente que le ha gustado, o dice que le gusta, para no quedar mal, pero somos pocos los que hemos alzado la voz para decir nuestra opinión.
El film es una decepción, en primer lugar en un film con un tema sumamente trillado; dos chicos adolescentes del valle de San Fernando en California, que se conocen en el instituto, se gustan y durante todo el film irán desarrollando su primer e ingenuo amor.
Protagonizada por Cooper Hoffman, hijo del fallecido Philip Seymour Hoffman, que por cierto su hijo tiene el mismo timbre de voz y es como escuchar a Philip. Por su parte la coprotagonista será Alana Haim, ambos se encuentran en el debut de su carrera, que realizan con maestría.
Hay que admitir, que Paul Thomas Anderson ejecuta un gran trabajo de dirección, la película se nota de alto presupuesto, y con una maravillosa escenografía, así como una gran ambientación, de principios de los 70 acompañados por un tremendo soundtrack de; David Bowie, Paul McCartney, Nina Simone y The Doors, entre otros.

La historia se centra en Gary Valentine, un aspirante a actor, quien a sus 16 años queda prendido de amor por la joven Alana, una joven fotógrafa que trabaja para el instituto. Alana que le saca 10 años, ve a Gary como un adolescente más, no le dándole importancia. Por su parte Gary hará todo lo posible por llamar su atención, desarrollando emprendimientos que a veces le va bien y a veces no tanto, en la conquista por su amor, el film desarrolla las aventuras y desventuras de ambos. Por su parte Alana, desencantada de los hombres de su edad, ve en el joven Gary un amor de inocencia que le cautivara.
Creo que este film hubiere ido muy bien como serie de televisión, pues está compuesta de varias historias pequeñas y sucesos independientes, acompañados de un tremendo elenco como Sean Penn, Bradley Cooper y Tom Waits, que realizan una interpretación magistral. Pero te quedas desencantado porque no sabes si son simples cameos, ya que el personaje en sí, no tiene ningún trasfondo y las historias no están ligadas entre sí, los personajes así como vienen, se van.

El film tiene mucho diálogo sin sentido, a ratos va superlento, sin saber a donde va, y cuando ya vas a bostezar, los protagonistas comienzan a correr, bajo una música superbuena de los 70, como si realmente estuviéramos viendo algo interesante.
El film da gotas de humor, pero son muy ridículas y a veces muy irreverentes e incómodos. Se burla de los inmigrantes asiáticos, en los Estados Unidos. Se mofa de la corrupción de los productores cinematográficos, denuncia el doble estándar de los políticos y pone al grupo LGTB como débiles, e insulta de forma antisemita abiertamente con comentarios muy groseros.
Es difícil apreciar una película, que constantemente está insultando a una variedad de personas, en mi opinión, a mí me pareció muy sobrevalorada y que no aporta nada nuevo al celuloide, un amor banal de juventud del instituto de dos chicos californianos.