por Catalina Donoso
Película chilena de drama familiar , está protagonizada por Grimanesa Jiménez (Casa de Angelis), Trinidad Gonzáñez (El reemplazante) y Bernadita Nassar, nos cuenta la historia de una familia compuesta por tres mujeres: Emilia, su hija Mónica y su nieta Leonor, quienes han vivido toda su vida en la misma casa en el barrio de Ñuñoa en Santiago de Chile.
La familia pasa por una crisis económica, a lo que Mónica se verá obligada a tomar serias medidas para poder solventar a su madre e hija. Una película sencilla que narra la historia de tres mujeres, de tres generaciones distintas, los años dorados, la madurez y la juventud, abuela, madre e hija.
Cada una tiene su carácter, mientras la hija lo único que quiere es libertad, abuela sigue viviendo en su mundo, Hippie de pintora y fumando lleva, dejando todo el peso en Mónica, quien frustrada por la enfermedad de su madre, comienza a deshacerse de sus posesiones, algo que conmociona a la abuela que se niega a decir adiós al pasado.
Durante el film seremos testigo del pasar de estas 3 mujeres, que no les es fácil la convivencia, pero intentan sobrevivir ante la vida y sobrellevar la situación lo mejor que pueden.
El guión es vago, el film tiene una iluminación es escasa y se ve que los estudiantes aún tienen un largo camino que recorrer en el mundo del celuloide.
La cámara se mueve demasiado con acercamientos muy prolongados, una película sin pretensiones, ni ambiciones que evoca al romanticismo familiar que tanto hace falta.
Este proyecto fue galardonado por Sanfic 2020 en la categoría de cine chileno, la cual fue dirigida y escrita por Valentina Reyes. Esta cinta surgió como el proyecto final de alumnos de cine de la Universidad del Desarrollo, quienes buscaban representar los conflictos de las mujeres sin la inclusión del género masculino
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