
por Catalina Donoso
Italia no solo se recorre, se saborea. Lo sabe bien Stanley Tucci, actor, escritor y amante confeso de la buena mesa, quien vuelve a conquistar nuestras pantallas con una nueva entrega de Tucci in Italy, la serie documental que se ha convertido en un cálido ritual para quienes buscan historias que nutren el alma.
Esta no es una guía turística común ni una serie culinaria convencional. Es una carta de amor a Italia, escrita con ingredientes frescos, anécdotas familiares, vinos compartidos en la sobremesa y paisajes que parecen salidos de una postal… o de una memoria afectiva.
Tucci, con su inconfundible estilo elegante y relajado, nos lleva a descubrir el corazón de las regiones italianas: desde la sofisticación de Milán hasta los sabores rústicos de Calabria, donde sus raíces familiares echan anclas. Cada episodio es una invitación a mirar más allá del plato: a entender la historia, las tradiciones y la identidad de un pueblo que vive para comer… y come para vivir.
Lo interesante es cómo, entre risottos y pastas hechas a mano, el actor va trazando un mapa emocional. No importa si habla con un chef con estrellas Michelin o con una nonna que cocina desde la intuición: todos tienen algo que decir, algo que enseñar. Porque en Italia, la comida no se sirve sin conversación, sin herencia, sin alma.
Tucci in Italy se emite actualmente a través de Disney+ y ha sido aplaudida por su autenticidad, sensibilidad y profundidad. Es también un recordatorio de que el verdadero lujo está en los detalles simples: una copa de vino, una buena conversación, una receta heredada.
“Comer bien no es solo un placer. Es un acto cultural.” – Stanley Tucci
Disponible en Disney plus de streaming. Un viaje imperdible para quienes aman Italia, el cine, la historia… y el buen vivir.
Tuve la oportunidad de conocer a Stanley Tucci en persona y fue una experiencia maravillosa. Es una persona encantadora, super sencilla y muy cercana. Le he seguido durante años, y poder conversar con él fue un verdadero placer. Admirar su carrera y luego encontrarme con alguien tan humano fue uno de esos momentos que no se olvidan.
Sin duda, un gran actor… y un viajero del alma.
