Todo aquel que se dice amante del cine no puede pasar por alto este día. Si alguna vez alguien te ha dicho que no puedes hacer algo, te voy a contar la historia de un joven soñador y aventurero que hizo estremecer a toda una nación una noche del 30 de octubre.
Orson Welles nació un 6 de mayo de 1915 en Kenosha, Wisconsin. Fue mucho más que un director: periodista, editorialista, conferenciante y agitador. Su carrera comenzó en 1934, cuando comenzó a trabajar en la radio en Nueva York, hasta 1947. Fue precisamente en la radio donde logró una de las hazañas más sorprendentes de la historia de los medios: la adaptación de La guerra de los mundos, de H.G. Wells, el 30 de octubre de 1938. La interpretación de Welles fue tan realista que causó un pánico masivo entre los oyentes, quienes tomaron el informe como un relato verídico de una invasión alienígena. La psicosis colectiva que generó hizo que las calles se vaciaran mientras la gente huía para salvar su vida. Este logro lo llevó a obtener un contrato sin precedentes en Hollywood en 1939.
La primera película de Welles sería Ciudadano Kane (1941), un clásico inmortal que cambiaría para siempre el curso de la historia del cine. En 1942, El cuarto mandamiento le permitió reafirmar su talento, y en La dama de Shanghai(1948), en la que aparecía junto a su esposa Rita Hayworth, se grabó una de las escenas más icónicas en la historia del cine, en la galería de los espejos.
A lo largo de su carrera, Welles también trabajó en Mr. Arkadin (1954) y Touch of Evil (1958), considerada por muchos como su obra maestra después de Ciudadano Kane. En su incansable búsqueda de la perfección, interpretó a personajes en adaptaciones de clásicos literarios como Macbeth (1948), Otelo (1952) y El proceso (1962), además de realizar una de sus obras más experimentales con Fraude (1973), una película que planteaba un falso documental.
Welles financió muchos de sus proyectos con las ganancias de su trabajo como actor, dedicándose por completo a sus pasiones como director. Su legado como uno de los directores más talentosos y revolucionarios de la historia del cine es indiscutible.
Orson Welles falleció el 9 de octubre de 1985 a los 70 años, de un ataque al corazón en Los Ángeles. Fue encontrado postrado sobre su máquina de escribir, trabajando hasta el final de sus días. Su influencia sigue viva en cada rincón del cine moderno, y su obra continúa siendo una fuente de inspiración para cineastas de todo el mundo.
Premios Óscar:
Mejor guion original por Ciudadano Kane (1941).
Positive Diva Magazine 