
por Catalina Donoso
Con la llegada de la primavera al territorio andino, el romance y los acordes irlandeses llenaron al Movistar Arena el pasado 4 de octubre, con la esperada presentación de Niall Horan. El exintegrante de la banda One Direction, que marcó a toda una generación, volvió a los escenarios chilenos, esta vez en un concierto más íntimo, donde la emoción y la conexión con sus fans fueron protagonistas.
Este año ya habíamos sido testigos del paso de Louis Tomlinson por Santiago en mayo, y ahora le tocó el turno a Niall, quien, con su estilo romántico y dulce, se presentó frente a un público entregado. A diferencia de los espectáculos de sus compañeros de banda, como Harry Styles, quien llenó el Estadio Bicentenario, el concierto de Niall fue más modesto, pero igual de especial. Su autenticidad y timidez lo hacen único, y su agradecimiento hacia sus fans fue evidente en cada palabra.
Niall sorprendió a todos al decir algo que pocos artistas mencionan: «Gracias por venir a verme. Me hace muy feliz. Gracias por comprar ese ticket; sé que a veces cuesta mucho, pero decidieron hacer esa inversión para verme, y eso me llena el corazón». Este gesto conmovió a los presentes, dejando en claro lo mucho que valora el apoyo de su público a lo largo de los años.

El concierto fue un viaje emocional por su carrera en solitario, desde su álbum debut Flicker (2017), con sus 13 canciones románticas y acústicas, pasando por Heartbreak Weather (2020), con un sonido más pop y atrevido, hasta llegar a The Show (2023), su más reciente trabajo. El irlandés deleitó a las 7 mil personas presentes con un repertorio que combinaba baladas melancólicas y temas más movidos, destacando el uso del violín como instrumento central.
Uno de los momentos más esperados fue cuando interpretó «Night Changes», un nostálgico recordatorio de su tiempo en One Direction, que hizo vibrar a la audiencia. La energía del público chileno, conocida por su entrega, se manifestó en varios momentos, especialmente cuando corearon los versos de «The Show» a todo pulmón, algo que Niall no dejó de destacar con aplausos y sonrisas.
El público chileno, siempre fiel y creativo, sorprendió al cantante con una coreografía de luces durante «Save My Life», una muestra más de la conexión especial entre los fans y el artista.
Sin duda, lo más especial de este concierto fue la cercanía entre Niall y sus fans. Cada interacción, cada sonrisa, y cada gesto de gratitud hicieron que este concierto fuera más que un espectáculo: fue un encuentro entre almas, una noche que quedará en el corazón de quienes estuvieron allí.
Niall Horan, sin duda lo más especial de un concierto es el público. Esa unión mágica entre el escenario y los fans fue lo que hizo que Niall se sintiera «en las nubes». Fue bellísimo ver a cada una de las fans sostener una nube de papel entre sus brazos, iluminadas por la luz de los móviles que decoraron la arena del Movistar. Este espectáculo de luces no solo iluminó el recinto, sino que también tocó el corazón de Niall, quien se sintió profundamente emocionado y agradecido, expresando que percibía una conexión genuina con su audiencia.
Durante el concierto, interactuó con el público y agradeció en reiteradas ocasiones la presencia de las fans. En un momento especial, hubo una coreografía de luces durante el coro de “Save My Life”, que el artista destacó con entusiasmo, diciendo: “Amo ese proyecto, está muy bien”.
En poco más de hora y media, Niall interpretó todas las canciones de su álbum The Show. Como es costumbre en los conciertos en Chile, cuando un “churrazo” visita nuestro país, el público lo apoda con el grito típico a coro de “mijito rico”, que en este contexto significa que está “muy bueno”. Con una inocencia en sus ojos, Niall no sabía del todo lo que le gritaban, pero respondía con un sincero “gracias” y “os quiero”, acompañado de una pequeña ternura que derretía los corazones de sus fans. Además, se ubicaba en una plataforma en el centro del escenario, lo que lo hacía aún más cercano al público.
El cierre del concierto fue espectacular, con «Heartbreak Weather» y «Slow Hands» como broche de oro. Antes de despedirse, Niall dejó un mensaje lleno de emoción: «Muchas de estas canciones las escribí pensando en cómo sería que me las cantaran en vivo, y gracias por concederme eso. Me hace eternamente feliz. Hasta pronto, volveré».
Se despidió de su público con una bandera chilena sobre sus hombros, y estoy seguro de que no fue un adiós, sino un hasta siempre, lo cual fue muy especial.
Quizás mi parte favorita del concierto es escuchar los testimonios de nuestras fans, que nos expresan sus impresiones. Aquí les dejo con sus palabras.
SET LIST
SHOWEVERTURE
NICE TO MEET YA
SMALL TALK
ON A NIGHT LIKE TONIGHT
ON THE LOOSE
THE SHOW
NEVER GROW UP
SAVE MY LIFE
NIGHT CHARGES
BLACK & WHITE
SCIENCE
THIS TOWN
YOU COULD START A CULT
HEAVEN
MUST BE LOVE
IF YOU LEAVE ME
MELTDOWN
MIRRORS
STILL
HEARTBREAK WEATHER
SLOW HANDS
